¡Hola, otra vez!😊 Hoy os vengo a contar otro de los talleres que hemos tenido la suerte de realizar en la asignatura de #INVTICUA23. Esta vez, lunes 15 de mayo, vino a clase Pep Hernández (@pephernandez), profesor de lengua y literatura en Educación Secundaria, además de especialista en el uso de la tecnología para la enseñanza y el aprendizaje de la lengua y la literatura. Su taller giró entorno a cuestiones como el desarrollo competencial y la tecnología como herramienta facilitadora del aprendizaje. Es por ello que Pep Hernández nos habló de las diferentes "Propuestas para el desarrollo competencial de la didáctica de la lengua y la literatura".
Nada más empezar el taller, Pep manifestó que cualquiera de las propuestas que realicemos como docentes de lengua y literatura deben desarrollar las 4 habilidades: hablar, escuchar, escribir y leer. Es decir, las propuestas didácticas que propongamos deben abastecer necesariamente las 4 competencias, sin dejar de lado ninguna de ellas. Cuando Pep nos preguntó ¿con qué competencia te sientes más comodo y con cuál menos cómodo? Llegué a la conclusión de que me sentía menos cómoda cuando tenía que hablar en público o expresarme oralmente, porque, en realidad, es la competencia que menos se he podido desarrollar en la secundaria, ya que no se le ha dado la suficiente importancia. No obstante, por otro lado, me siento más cómoda escuchando o leyendo, pues, durante nuestro recorrido académico, nos hemos acostumbrado al rol pasivo, poco participativo y, por lo tanto, creo que "escuchar" es la destreza que más hemos tenido que trabajar.
Asimismo, también reflexionamos sobre cómo debe ser el docente ideal y para ello pensamos en un profesor o una profesora que nos había marcado durante nuestra etapa en la secundaria. Fue un ejercicio muy bonito escuchar a mis compañeros y compañeras comentar las razones por las que el docente elegido había sido tan significativo en sus vidas. Al fin y al cabo, un docente no solamente debe saber transmitir el contenido relacionado con su asignatura sino que también debe hacer que el proceso del aprendizaje del alumnado sea lo más ameno y significativo posible. En este sentido, Pep Hernández nos recomendó algunas de las películas donde se aborda la figura del docente y/o el sistema de enseñanza-aprendizaje. Por lo tanto, algunas películas que tengo pendientes por ver son las siguientes: La lengua de las mariposas, Diario de la calle, La clase, Los chicos del coro, Mentes peligrosas, El indomable Will Hunting, El club de los emperadores. Únicamente he visto El club de los poetas muertos y es una de las películas que más me gustan porque aporta una gran reflexión acerca de lo importante que es enseñar desde el corazón, con pasión. De estos films seguramente podamos extraer características o atributos que debe poseer un buen docente y que podríamos tener en cuenta para nuestro futuro como profesores de lengua y literatura.
Siempre hay que tener en cuenta al alumnado y en la evaluación no es una excepción, pues el alumnado puede participar en su propia evaluación o evaluar, incluso, a sus compañeros y compañeras. De hecho, llevamos a cabo una actividad en grupos durante este taller en el que trabajamos la coevaluación, pues después de haber realizado la actividad tuvimos que corregir a otro de los grupos su actividad. De esta manera, pudimos establecer un debate y reflexionar sobre las diferencias y similitudes que habíamos aportado los diferentes grupos.
En conclusión, fue un taller de lo más entretenido, en el que aprendimos muchísimo de Pep, pues nos dio esos truquitos y herramientas que necesitamos para que, en un futuro (ojalá sea cercano), podamos utilizar en nuestras clases con nuestro alumnado.
Espero que os haya gustado. ¡Saludos!
Sandra Hurtado
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